Muy diferente a la imagen habitual que tenemos de las palomas, estas no son el ave de la paz, ¡Todo lo contrario! este último año se declaró a la paloma como una plaga, autorizando su eliminación.
Además de comerse parte de la producción en ciertos casos, el guano posee bacterias y daña cualquier infraestructura. Pero el excremento no es el único transmisor de enfermedades, sus plumas también y contienen ectoparásitos.
Las palomas son un problema durante todo el proceso, porque suelen comerse las semillas o granos en cualquier etapa, desde la siembra hasta que son cosechados y acopiados. Sin embargo, hay un peligro mayor, las enfermedades como la histoplasmosis, clamidiosis, criptococosis, salmonelosis y estafilococosis, entre otras. El guano es la fuente de más de 30 microorganismos patógenos.
Además de las diferentes enfermedades que transimte este emplumado, genera suciedad y deterioro en la infraestructura por el ácido fosfóricos y úrico del que está compuesto el excremento de las aves. Una vez que este se junta con las plumas, más los nidos, genera suciedad, atrayendo cucarachas y escarabajos.
Por todos estos motivos es que recomendamos un control adecuadod e aves en acopios y silos, mediante un sistema de exclusión adecuado con materiales resistentes, además del uso común en infraestructuras de redes y pinches, evitando que estas se acumulen en los alrededores.
Recordá entonces, aunque sirvieron durante décadas para enviar mensajes, no descuidar a este pequeño emplumado.
Stefania Silva
Bioserv S.A.